Symbiotur tiene como propósito la divulgación del turismo simbiótico. Un modelo turístico, en el que todos los participantes (activos y pasivos), salgan beneficiados: Los propios viajeros, los agentes económicos del sector, la población local, y el planeta. Por qué creemos que una buena gestión del turismo, puede aportar impactos positivos allí donde se desarrolle.
Según la RAE, la SIMBIOSIS consiste en: Asociación de individuos animales o vegetales de diferentes especies, sobre todo si los simbiontes sacan provecho de la vida en común.
Y algo que me gusta todavía más, es la etimología de Simbiosis:
Del griego –Syn, que significa “juntos”, y de Biosis, que significa “Vivir”. Así que significaría “vivir juntos».
No suena mal, ¿verdad? Un turismo simbiótico, en el que todos las partes convivan en armonía.
En la naturaleza encontramos muchos ejemplos de simbiosis. Y, ¿Qué pasaría si intentáramos aplicar esta relación a nuestro modelo turístico? Porque, no nos engañemos, en el modelo turístico actual, siempre salen perdiendo los mismos (normalmente el medioambiente, y las comunidades locales, pero a la larga todos). Por eso, es necesario implementar un nuevo modelo turístico, poniendo en práctica esta relación simbiótica, dónde tanto los agentes turísticos como el medio ambiente, salgan beneficiados de esta interacción turística. Pero muy importante: sin generar una dependencia. Un difícil equilibrio, en el que no se trata solamente de reducir el impacto negativo de la actividad turística, si no incluso intentar transformarlo en un impacto positivo.
Un win-win.

Para que este proceso y esta relación sea factible, es necesario aplicar los conceptos ya conocidos: ecoturismo, turismo responsable, consciente, regenerativo, ….Todos ellos buscan lo mismo. Frenar, y repensar. Y es completamente necesario este cambio, para que nada, ni nadie, salga perjudicado de una actividad que debe (y puede) aportar beneficios sociales, económicos, ambientales. Para todos.
Cuando los turistas pueden sentir a través de experiencias únicas en lugares mágicos pueden tener emociones que los lleven a reflexionar sobre su impacto ambiental al realizar esos viajes que tanto nos llenan de placer y felicidad. Necesitamos cocrear destinos verdes, donde la huella de carbono sea lo màs cercano a cero y beneficiemos a las comunidades locales con una derrama económica que les permita mantener esos recursos naturales de manera sostenible para las futuras generaciones